Por Irma Mando
En un giro inesperado, la Unión Eléctrica de Cuba (UNE) ha anunciado su más reciente innovación para enfrentar la crisis energética: la asignación de electricidad a través de la emblemática libreta de racionamiento. Sí, esa misma que durante décadas ha sido fiel compañera del cubano promedio para adquirir arroz, frijoles y, ocasionalmente, pollo congelado.
Ante apagones que superan las 20 horas diarias y con un país donde más del 46 % permanece a oscuras simultáneamente, la UNE ha decidido que la mejor manera de garantizar al menos una hora diaria de electricidad por circuito es mediante este sistema "organizado" y "justo". Según fuentes oficiales, cada hogar recibirá un cupón mensual que podrá canjear por kilovatios, dependiendo de su "necesidad revolucionaria".
¿Cómo funcionará?
- Asignación por núcleos familiares: Familias numerosas tendrán prioridad, pero solo si demuestran su compromiso con el ahorro energético (léase: tener bombillos apagados todo el día).
- Turnos rotativos: Cada barrio tendrá su “hora de gloria” para encender ventiladores y cargar celulares. Eso sí, no se garantiza que coincida con el horario de novelas.
- Electricidad premium: Aquellos con divisas podrán adquirir "paquetes eléctricos" adicionales en MLC (Moneda Libremente Convertible), o en dólares, porque hasta en la oscuridad hay clases sociales.
Reacciones populares
Mientras algunos celebran la creatividad del gobierno, otros se preguntan si también habrá una “libreta digital” para racionar el Wi-Fi. En redes sociales, memes sobre “paquetes de luz” y “apagar para avanzar” no se han hecho esperar.
Por su parte, fuentes gubernamentales aseguran que esta medida es temporal hasta que las termoeléctricas vuelvan a funcionar... o hasta que el sol decida brillar más fuerte sobre los paneles solares aún en construcción.
La UNE demuestra una vez más que en Cuba no hay crisis insalvable… siempre y cuando tengas paciencia, velas y una buena dosis de humor, con algún familiar en el extranjero.