Por Ana Lisa Melhoyo
En un sorprendente giro diplomático, el gobierno de Estados Unidos ha decidido sacar a Cuba de su lista de países que patrocinan el terrorismo, pero con una condición peculiar: que Randy Alonso, el director de la Mesa Redonda, sea excluido del programa. Los rumores apuntan a que la razón principal detrás de esta solicitud no es solo su estilo "informativo", sino más bien su apariencia, que ha sido calificada como "poco atractiva", más explícitamente: "feo con cojones".
La Belleza en la Política
Mientras el mundo observa cómo se desenvuelven las relaciones entre ambas naciones, los altos mandos estadounidenses parecen haber llegado a la conclusión de que un "rostro más amigable" podría ser la clave para mejorar la imagen de Cuba en el exterior. ¿Quién necesita reformas económicas cuando puedes simplemente cambiar a la cara del programa? Tal vez pronto veremos un nuevo formato de la Mesa Redonda, donde los panelistas sean elegidos por su atractivo visual en lugar de su capacidad analítica, y que quede claro, que no es que estemos diciendo que Randy tenga mucha capacidad.
La Reacción Cubana
Por su parte, los cubanos se preguntan si esta medida es un insulto o una oportunidad. Algunos sugieren que podrían enviar a Randy a un curso intensivo sobre estética, mientras otros proponen que lo mantengan como símbolo de resistencia ante los estándares superficiales impuestos por el imperio. En cualquier caso, el futuro de la Mesa Redonda parece estar en manos de una estética que podría eclipsar el contenido.
Así que, mientras Estados Unidos y Cuba navegan por estas aguas turbulentas, recordemos que en la política, a veces lo que importa no es lo que se dice, sino quién lo dice. Y si eso significa sacrificar a Randy Alonso en el proceso, quizás sea un pequeño precio a pagar por una nueva era de relaciones diplomáticas. ¡Que empiece el casting!